No me quedo parada
El pasado mes de febrero me vi “atrapada” por las movilizaciones tractoristas de aquellos días. ¿Os acordáis? Yo perfectamente, ¡cómo iba a olvidarlo! Cada mañana tenía que salir a la carrera para llegar al trabajo y no sabía si iba a llegar, cuándo y si luego iba a poder volver a casa. Confieso que aquellos días viví en un estado de ansiedad, nada grave, por supuesto. Es mucho más lo que imagina tu cabeza que luego lo que sucede en realidad. El caso es que de aquellos días saqué una muy buena conclusión sobre mí y quiero que la apliques tú en tu día a día. Cuando iba por la carretera y me topaba con alguna cortada por este motivo, me miraba en Google maps otra alternativa. Cuando llegaba de nuevo a otro atasco volvía a hacer lo mismo. El caso era no quedarme parada, perdiendo el tiempo, en un atasco que no iba a terminar, porque los tractores bloqueaban el paso. Esto no era a nivel de los atascos en Madrid, porque al final los coches van avanzando —despacio, pero avanzan— no, suponía estar horas parada en el coche hasta que el agricultor quisiera dejarme pasar. Y ojo que estaba totalmente con ellos en sus movilizaciones, pero entender que yo tenía que llegar al trabajo y luego volver a mi casa (lo segundo más que lo primero). Me meí por caminos de tierra y grava, por carreteras secundarias totalmente deshabitadas, me perdí por las calles de varios pueblos, vi los campos de paneles solares que tenemos en la Mancha (que son demasiados, por cierto). Pero nunca me quedé parada esperando a que otro me diera la opción de avanzar. Si no podía seguir por un camino, me iba por otro. Sin detenerme. Y así es como funciono en mi día. Siempre avanzo. Si me atasco por algún motivo, busco una alternativa y sigo. No me quedo parada. Nunca. Esa no es una opción. Estoy preparando una caja muy especial para los primeros interesados en mi libro. Lo tendremos en preventa este verano. Estate atento si quieres conseguir uno. Después, no habrá caja, solo el libro. Si quieres alguno de mis libros anteriores puedes pinchar aquí para el primero o contactar con Fagus editorial para el segundo. Este fin de semana terminaré de darle la última revisión para que vaya a edición y de ahí a imprenta. Seguimos adelante. Os deseo un feliz fin de semana.
